Bienvenido al Blog de RAUL SANCHEZ QUINTERO

Quizás uno entre los últimos que, sin esperar hacerse un día profeta, claman en el desierto contra ciertas injusticias interesadamente toleradas por los altos poderes de la sociedad humana. Los profetas que clamaban en el desierto han desaparecido con la aparición de Internet. Ahora los que se cuidan del efecto de las llamaradas de sus palabras son los mismos de siempre, poderosos cazadores en oposición a Yavé, ensoberbecidos por el continuo uso y abuso de "las mieles del poder", cito: los hermanos Castro, Teddy Obiang, el Ogro de Birmania y la dinastía Kim. De manera que, a partir de este punto de encuentro, podré compartir con todos aquellos que así lo deseen, mis inquietudes, opiniones, resentimientos y propuestas. Y así es que me tenéis aquí, en esta hermosa playa africana, junto a mi mascota que es mi familia y junto a este inmenso mar que a todos nos une.




domingo, 24 de abril de 2011

Musito, el nuestro, el Mirabalejo

A Musito le han crecido los enanos.   La maledicencia que persigue a los que triunfan con sus propósitos en la vida.  Las malas lenguas, esa vox populis que dicen los culteranos, le cocinan en su propia salsa y resulta  gracioso relacionar algo de lo que dicen.
Si los españoles esgrimen una sonrisa irónica  cuando alguien se refiere a la Beltraneja, no pueden hacer menos los cubanos cuando  citan a su Mirabalejo. Se trata de una de esas tantas suspicacias que subyacen en la leyenda oficial del IV Dictador de la República, el mismo que, de niño, posó en brazos del II -Batista- ante la atenta mirada de Ángel Castro.  Algo que parece ser  obra de la mano negra de la abuela Dominga, a la que todos denominaban: La Bruja; porque  se sugiere  por la foto que algún poder demoníaco le transmitió el Indio.
En cuanto a lo de Mirabalejo, se explica por la silueta de un siniestro personaje, el teniente jefe del puesto de la guardia rural en  Birán, presunto padre natural de Musito, que no le dio el nombre a su hijo, pero eso sí, el apodo: de tal manera que, el Chino Mirabal se transformó en el Chino, a secas.   El teniente Mirabal  terminó sus días en la mayor desgracia después de haber sido encarcelado por su propio hijo, pero aquí tenemos a Musito, gobernando.
Otra nebulosa se cierne sobre la relación de Musito y Alfredito Guevara..  Según las malas lenguas los dos -o, al menos, uno de los dos- son maricones,   De Alfredito no queda la menor  duda, Musito, en cambio, ha permanecido a la sombra, no ha salido del armario, pero eso sí, no podrá negar nunca que Alfredito fue su maestro, en el marxismo y la transgresión. Pero los comentarios no quedan aquí, la gota que revienta el vaso la debemos a Benigno, insigne alto oficial del ejército cubano, sobreviviente de la guerrilla boliviana del Ché Guevara, lo dice en su libero de memorias: lo de Vilma fue un traspaso de poderes, del hermanito mayor al menor, así fueron las cosas.
Pero para finalizar, sin escatimar detalles, las malas lenguas tienen que remitirse nuevamente a Batista, porque Batista quiso y así lo consiguió, formar parte del organigrama de Cosa Nostra, justificándose tal hecho con la leyenda falsa de que su padre era siciliano y que, de aquella localidad procedía el color de su tez morena.  Musito, por supuesto, ha ido más lejos. Ha conseguido colocar a una hija suya  en el centro gravitacional de la mafia casándola con un señorito de esa localidad. Los viajes de Musito a Sicilia han dejado de ser un secreto, un periodista inconsciente ha hecho público este episodio.
Las fuentes autorizadas que han venido recogiendo estas informaciones extraoficiales se extienden a lo largo de medio siglo. Puedo citar a Teté Casuso, Pardo Llada, Juanita Castro, y Benigno. No expongo nada de mi propia cosecha.  ¡Que juzgue el lector!