Bienvenido al Blog de RAUL SANCHEZ QUINTERO

Quizás uno entre los últimos que, sin esperar hacerse un día profeta, claman en el desierto contra ciertas injusticias interesadamente toleradas por los altos poderes de la sociedad humana. Los profetas que clamaban en el desierto han desaparecido con la aparición de Internet. Ahora los que se cuidan del efecto de las llamaradas de sus palabras son los mismos de siempre, poderosos cazadores en oposición a Yavé, ensoberbecidos por el continuo uso y abuso de "las mieles del poder", cito: los hermanos Castro, Teddy Obiang, el Ogro de Birmania y la dinastía Kim. De manera que, a partir de este punto de encuentro, podré compartir con todos aquellos que así lo deseen, mis inquietudes, opiniones, resentimientos y propuestas. Y así es que me tenéis aquí, en esta hermosa playa africana, junto a mi mascota que es mi familia y junto a este inmenso mar que a todos nos une.




martes, 31 de mayo de 2011

El regalo griego

Me acaban de regalar una nueva línea telefónica . No puedo  mas que atribuirlo al perfil psicológico que, de mi persona como cliente, han elaborado los especialistas de la casa, psiquiatras y psicometristas al servicio de la causa común: ganar dinero.  En mi entorno, a nadie le ha sucedido tal cosa.   Los amigos me miran extrañados cuando les refiero el sucedido.  ¿Qué has hecho tú para merecer ese regalo?  ¿Se trata de este blog? ¿ O de que es el resultado de los test, que disimuladamente me han hecho, así lo recomiendan?.
Una primera vez lo rechacé, porque, en realidad me parecía un exceso;  pero después de una segunda propuesta muy originalmente  planteada decidí aceptarla.  Así que ahora tengo dos números dirigidos a un único aparato.  Un aparato que, como es lógico, está registrado a mi nombre tengo necesariamente que preguntarme: ¿Qué más quieren averiguar?
Pero me han regalado una nueva línea telefónica y, de momento, soy feliz como un enano.





domingo, 22 de mayo de 2011

La Banderita Tricolor

¿Cual o cómo será el futuro de Cuba?  ¿Volverán las antiguas golondrinas? A colación nos viene bien un artículo debido a la pluma de Sergio Carbó y recogido en el volumen correspondiente de la monumental antología de la literatura cubana recopilada por Carbonell.  El artículo, en cuestión, llevaba por título: "La Banderita Tricolor".
Con una prosa  sintética y enérgica que contrastaba con la muy elaborada de los venerables Gonzalez Lanuza y Hernández Catá, Carbó hacía un recuento  panfletario de las entidades financieras implicadas en la economía del país y citaba el número de empresas extranjeras radicadas en el territorio nacional, significando el ridículo papel que jugaba el empresariado cubano  en la gestión económica de la nación.  Por  el cuadro que tenemos actualmente, la cosa, parece ser, va por allí.  Los Castro, además de dejar al pueblo cubano desplumado, se han apresurado a estimular los apetitos de los buitres, que ya se afilan las garras y los picos para insertarlos en el cuerpo del cadáver, contándose por decenas los que ya lo hacen en la carne viva del moribundo.
Pero si  así se perfila el entramado económico, ¿cómo se perfila el social? ¿Volverá, si es que alguna vez se marchó, el racismo visceral? ¿Volverán a presumir algunos de sus conocimientos de la lengua inglesa? ¿Volverán a llamar: guajiros , a los ciudadanos de las provincias? ¿Volverán los hijos de los gallegos a presumir de padre español, cuando lo que tiene que hacer un cubano es presumir de padre, abuelo y bisabuelo cubano?
El castrismo, no solamente nos ha perjudicado en todos los sentidos; no sólo nos ha arruinado el pasado y el presente, el caso es que nos deja un futuro complicado.  La nacionalidad cubana, digan lo que digan, no está todavía consolidada, los efectos de la emigración, -considerando  su magnitud y su presumible peso en el inmediatop futuro del archipiélago- se presentan  como  una incógnita-.  ¿Cómo se comportarán los que regresen?  ¿Como chulanpines?  Confiemos en el sentido común de los cubanos y en las buenas intenciones de su "inteligencia".
O, como decía Carbó, continuaremos danzando todos alrededor de una banderita tricolor.