Erase un rey viejo que languidecía en
una isla cada día más estéril. Un buen día tomó una decisión
y ordenó a sus más fieles y virtuosos caballeros se ocuparan en la
búsqueda del Santo Grial y estos partieron, divididos en pequeños
grupos, hacia los cuatro puntos cardinales del planeta Tierra. De
aquel rey, se comentó después que, detrás de su religiosidad
aparente, escondía el banal deseo de recuperar su virilidad perdida
y, con ella, del esplendor de la naturaleza que alguna vez adornó
los prados, los valles y las montañas de su pequeño reino. El rey
era impotente y estaba a punto de morir, de ahí la prisa que atizaba
a sus caballeros.
!Cuánto paralelismo existe, entre la
trama de esta historia y la que hoy vivimos los cubanos! Mientras
sus dos últimos dictadores agonizan, la isla se pudre en el abandono
absoluto y, con la isla, sus isleños, cada día más empobrecidos,
languidecen sin esperanzas de futuro. Los jóvenes avispados tratan
de escapar y escapan de la tumba abierta en la que se ha convertido
su país y sólo aquellos que disfrutan algunos privilegios a la
sombra del poder y los fanáticos que nutren la clientela de las
izquierdas europeas:: maricones y hembras lúbricas envueltos todos
siempre por los humos aromatizados del hachís, continúan
aplaudiendo “el proyecto político” puesto en marcha por esos
dos catetos adornados de virtudes que responden a la marca: Hermanos
Castro.
En virtud de la realización de este
proyecto, a instancias del Máximo Líder, se desató una guerra
contra el imperialismo yanqui cuyos fructíferos resultados ya
podemos constatarlos: la comunidad cubana en los EEUU se ha
multiplicado muchas veces, sigue creciendo y con los dólares que
envía a sus familiares todavía en prisión contribuyen en buena
medida a mantener el status quo, lo cual equivale a decir: al
régimen. !Extraordinaria víctoria sobre los yanquis la que de
este modo ha conseguido el (los) Comandante(s)¡ Si es que a
semejante disparate se le puede considerar un éxito y como tal se le
venda a los secuaces. Pero lo cierto es que, si alguien ha
contribuído a la materialización de la doctrina Monroe y a que la
anexión de Cuba a los EEUU se convierta en una realidad, ese es y
ha sido: Fidel Castro Ruz.